Gibraltar
Hemos bajado a desayunar al comedor del hotel, y cogemos de nuevo el coche para ir a Gibraltar. Hoy hemos optado por dejar el coche en La Línea, y pasar andando la frontera, lo que te hace tener una mejor idea del paso fronterizo y de las pistas del aeropuerto de Gibraltar.
Al ser domingo, encontramos una ciudad muy diferente a la de ayer. Apenas había gente por la calle, y muchos sitios estaban cerrados. No lo esperábamos y, la verdad, nos aburrimos. Dimos un paseo por el puerto deportivo, bastante solitario también, y se notaba que aquí los precios son más altos. En el centro, nos entretuvimos sobre todo con los monos, que andurreaban a sus anchas por las calles, y nos movimos por las cafeterías que hay alrededor de Casemates Square.
Después del café, regresamos al hotel y desde allí fuimos andando al centro comercial de Los Barrios, y echamos una tarde-noche, de cine, palomitas y hamburguesas. Teníamos la sensación de que este viaje a Gibraltar ya se había acabado.